domingo, 12 de agosto de 2007

On fire


On fire
quedan cien hijos desperdigados por ahí
casi todas mis expectativas están cubiertas
las necesidades no tienen margen de error,
insatisfacción o zonas de riesgo
estamos cerca del fuego
on fire
estoy expuesta y sin embargo.

Cuanto más bichada está la zona más me quedo
¿hay riesgo entre los animales mientras duermen?
los encuentro a todos juntos hay un enredo negro hay tantos alces como ciervos
los animales despertaron feroces hoy
no hay forma de pararlos ¡no me entienden cuando les hablo!

¿Y si sucesivamente
decidiéramos no volver a tener hijos?
En la playa el germen prolifera, se expande
estamos cerca del fuego otra vez
debajo de la línea de pobreza hay otra línea más delgada
nos acostamos boca abajo en la arena
el sol pega con todo ya no puedo pensar ni siquiera en nuestros hijos
prefiero las mascotas y sacarlas a pasear bien temprano.

Esterilizar las agujas es un gesto del montón
nosotras desvirtuamos las razones
me siento quemar los pelitos de los brazos
on fire
no suena la sirena cuando una cierta distancia nos separa
en la arena estamos en riesgo
los animales nos protegen, se nos parecen tanto
¿estábamos en el trópico cuando sentimos el contagio?

Tan cerca del fuego ya no sentimos el calor
algunas medidas son absurdas si no contemplan la necesidad
nos diferenciamos solamente por los gestos
nuestras caras se parecen demasiado entre las llamas
nos bañamos con jabón para quitar las impurezas
sin embargo estamos infectadas hoy
las mascotas perciben el peligro y no se alejan.

La incondicionalidad es algo que nos emociona
¿es que las expectativas de permanencia nos hacen amarnos más?
tan cerca del fuego ya no sentimos el calor
homocigotas
los piojos se reproducen sin necesidad de copularse
la superficie no tolera el calor sin transformación.

Sueños de continuidad pura
si la interrupción ya no tiene sentido
siento el calor otra vez muy cerca
pequeñas zonas de riesgo entre la animalada ajena
on fire
el síndrome ha sido frecuentado
el plan no es eficiente si nosotras no logramos comprender
de todos modos
nos asimilamos perfectamente.

Nosotras no queremos hijos
amor de animal en la piel de una bruta yegua
¿adquirimos la necesidad
o solamente la reproducimos
cada tanto, de a pequeños pasos, sucesivamente?

Y si la reactividad
y si el espacio de indeterminación lo permite
¿las ciencias se equivocan cuando miden el calor en grados?
Perpetuar la especie no es un deseo natural
quizá no desee quedarme entre los bichos para siempre.


1 comentario:

Anita dijo...

Gran poema.
Me gustó mucho!

Saludos!